40. Virgen de Guadalupe para el coronel Enrique Carrola Antuna
41. Ángel del martirio con palma (Montoya)
42. Ángel pasionario con guirnalda de laureles (Montoya)
43. Ángel con capa para Ambrosio Sánchez (Montoya)
44. Ángel doliente con corona de laureles y pensamientos
45. Ángel sobre pórtico con ofrenda de rosas y pensamientos (Montoya)
46. Ánima con guirnalda de rosas
47. Pleurante con ofrenda de rosas
48. Ángel con venera para la familia Martínez
Escultura Funeraria
El Panteón de Oriente de Durango a la par de los panteones contemporáneos en México, se convirtió en recinto que alberga memoriales bajo la idea romántica que caracterizó el siglo XIX.
A finales del periodo decimonónico, principalmente durante el porfiriato, se manifestaron en la Mansión del Reposo una gran variedad de monumentos, desde las más elaboradas capillas neogóticas hasta las lápidas de mayor decoración ornamental, siendo la escultura funeraria el elemento de mayor predilección por los deudos de la llamada Belle Époque.
Durante la segunda mitad del siglo XIX y parte del XX se encontraron laborando más de cincuenta canteros y albañiles en Durango, encabezando esta noble labor la familia Montoya. El Panteón de Oriente cuenta actualmente con más de 700 monumentos funerarios entre los que destaca la obra escultórica de Benigno Montoya y su escuela, quienes proyectaron ángeles, ánimas y figuras religiosas elaboradas en cantera blanca.
Otro de los componentes importantes para este panteón es la escultura suntuaria; memoriales importados, no solo en material sino en morfologías artísticas inspiradas en las obras contenidas en los panteones más importantes de Europa.
El mármol de Carrara de tipología venato se manifestó en memoriales para este panteón, que aunque fue en menor número, no prescinde en importancia valor escultórico y arquitectónico. La obra escultórica en mármol probablemente pertenezca a casas de marmolerías asentadas en México como Biaggi Hermanos, Ponzanelli, Adriani, M. Giacomo, Almo Strenta y Norville Navari entre otras, ya que fueron las más relevantes en la materia.
En la actualidad el Panteón de Oriente conserva un gran número de esculturas funerarias; obras realizadas en mármol o cantera, relieves, altos relieves o esculturas exentas con diversidad de motivos religiosos que proyectan el dolor y la fe de los deudos.