La pieza escultórica se encuentra asentada sobre un pedestal rectangular de cajeados curvilíneos hacia las cuatro dimensiones, y al frente una placa de mármol con la epigrafía y epitafio funerario. Los remates del pedestal muestran frontis de medio punto que se unen a las cuatro cornisas procurando simetría.

El remate de este conjunto se conforma por una peana llana cuadrada sobre la que aparece un ángel a contraposto revestido con ropón y cíngulo; elementos congruentes y de buena composición volumétrica. El ángel porta un ramo de pensamientos y su rostro emite un verdadero sentimiento de tristeza, no visto en otras piezas de la misma tipología.